Un mes más, llega la actualización de los alquileres a aquellos contratos de arrendamiento de viviendas a los que les corresponda la renovación anual. Desde el pasado mes de abril de 2022, tienen impuesta una limitación a la subida del 2%, vinculado al Índice de Garantía de la Competitividad (IGC), y que se mantendrá hasta finales de 2023.
Con la entrada en vigor de la Ley de Vivienda, se mantendrán los límites a la subida de las rentas, en un 3% durante todo 2024, y a partir de 2025 se aplicará un nuevo índice de referencia para la actualización de las rentas de alquiler que deberá tener preparado el Instituto Nacional de Estadística (INE) y el Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma).
El Índice de Precios al Consumo (IPC) era hasta hace 15 meses el índice de referencia del mercado del alquiler. A cierre del mes de mayo, continúa la moderación de la inflación (3,2%) vista desde haces meses, cerrando por tercer mes por debajo del 5%, aunque el objetivo del Gobierno y de toda la UE es la de alcanzar un 2% estable de crecimiento.
Desde que se impuso el tope del 2% a la renovación de alquileres, esta ha sido la menor diferencia en la comparativa con el dato de la inflación.
Según los cálculos de idealista, el principal marketplace inmobiliario del sur de Europa, los alquileres que firmaron su contrato en junio verán un incremento de 180 euros anuales con el actual límite del 2%, según el estudio basado en una vivienda tipo piso de dos habitaciones.
Con el último dato publicado de la inflación, el dato definitivo de junio cerró en el 3,2%, los alquileres habrían registrado una subida cercana a los 290 euros al año de media nacional. La diferencia entre uno y otro ronda los 110 euros.
Estos datos varían en función de los mercados de arrendamiento locales. Y, por ejemplo, en Barcelona, San Sebastián, Madrid, Palma o Bilbao, la renovación del contrato supone entre 200 y 240 euros/año más con el actual tope del 2%.
En cambio, si se hubiera mantenido esa actualización con la inflación, el aumento de los alquileres en estas capitales se habría movido en una horquilla entre los 325 euros y los 385 euros más al año.
Nuevas rentas con la actualización del 2%
Haciendo zoom en estos importantes mercados, en Barcelona, la renovación del alquiler supondrá una subida de 240 euros al año para dejar un nuevo alquiler medio de 1.020 euros/mes. En Madrid, mientras tanto, el aumento será algo más moderado, de poco más de 215 euros anuales para dejar una nueva renta mensual cercana a los 920 euros. San Sebastián supera de nuevo a la capital española, y toca nuevas rentas al mes de casi 970 euros, tras concretar un alza de unos 230 al año.
Por detrás de estas tres ciudades, los alquileres que renuevan en junio en Palma y Bilbao actualizan sus rentas en poco más de 200 euros al año, con un nuevo alquiler medio de algo menos de 870 euros/mes. Todavía por encima de la media nacional aparecen Valencia y Vitoria ,que registrarán cambios de rentas entre 180 y 190 euros al año, para dejar un nuevo alquiler medio de 765 y 816 euros/mes, respectivamente.
La menor diferencia con la inflación desde que se aplica el límite a los alquileres
La renovación en junio de los contratos de arrendamiento de viviendas con una inflación del 3,2% hubiera supuesto en los principales mercados una subida mayor que la media nacional, como hemos visto antes.
En Barcelona se habría registrado una subida anual de casi 385 euros al año, una diferencia de casi 145 euros con el incremento actual vinculado al 2%. La renta se habría actualizado hasta los 1.032 euros/mes.
En San Sebastián, el aumento anual de la renta hubiera sido de más de 365 euros al año, para dejar un alquiler de casi 980 euros/mes, lo que supone una diferencia de casi 140 euros/año frente al índice actual.
En Madrid, mientras tanto, la subida hubiera sido de más de 345 euros anuales, y dejaría un alquiler medio de casi 930 euros/mes, siempre teniendo en cuenta que estamos tomando como referencia un alquiler medio de un piso de dos habitaciones de junio de 2022. La diferencia entre la supuesta subida con el IPC y con el actual IGC llega a los 130 euros anuales.
En Bilbao y Palma, finalmente, la actualización de rentas con la actual inflación habría supuesto un aumento de más de 325 euros al año, con lo que dejaba un nuevo precio cercano a los 890 euros/mes. Y es que la diferencia entre uno y otro supera los 120 euros al año.