Uno de cada tres empleados en España desempeña una labor que requiere menos formación de la ha conseguido el trabajador, según los datos recopilados por Eurostat durante 2022. Mientras que en nuestro país, la tasa de sobrecualificación alcanza al 35,9% de los trabajadores, la media Europa se encuentra en el 22,2%, con Luxemburgo (6,8%) con el porcentaje más bajo.
El dato del instituto de estadísticas europeo mide la proporción de personas que ocupan un puesto de trabajo que requiere menos formación de la obtenida respecto a la población en edad de trabajar. Y es que España lleva liderando esta tabla desde el arranque de la serie histórica en 2013.
Junto a España, y todavía por encima del 30%, se encuentran Grecia (32,4%) y Chipre (31,8%. Irlanda y Austria también superan el 25% de trabajadores sobrecualificados.