Todo queda en casa cuando se trata de Inditex. La constructora del gigante gallego, que fundamentalmente realiza obras para el propio grupo, elevó el pasado año su facturación un 54%, hasta alcanzar los 543,8 millones de euros. Este elevado incremento del negocio se debe a la mayor actividad en la red comercial del grupo, que el pasado año abrió megatiendas de Zara en la Plaza de España de Madrid, en Valencia y en Londres, además de un Lefties en la Gran Vía madrileña.
Además, Goa-Invest también se ha encargado de una ampliación de la sede de Inditex en Arteixo (A Coruña) de 170.000 m2, que ya impactó positivamente en las cuentas de la constructora. Este nuevo inmueble, en el que el grupo va a invertir 238 millones y que previsiblemente estará acabado este año, alojará a los equipos comerciales y de diseño de Zara.
Esta mayor actividad provocó que el beneficio de Goa-Invest se disparara un 283%, hasta los 19,2 millones, según adelanta CincoDías. La empresa decidió, igualmente, repartir un beneficio de tres millones. Adicionalmente, aportó 16,9 millones a reservas voluntarias. Actualmente, el patrimonio neto de esta constructora alcanza los 27,86 millones. El 47% del negocio de esta constructora se produjo de España, concretamente 257,2 millones, y el 51,7% en el resto de Europa.
Esta sociedad fue constituida en 1987 para encargarse de los proyectos de urbanización, promoción, construcción y rehabilitación –según figura en sus cuentas– de los activos inmobiliarios en los que opera el grupo textil. Está presidida por José Manuel Queijeiro, directivo de la empresa desde hace más de 30 años.
Goa-Invest tiene presencia permanente en Reino Unido, Francia, Italia, Portugal, Polonia, Rumanía, Grecia, Bulgaria, Croacia, Turquía, Dinamarca, Serbia, Holanda y Suiza. Además de contar con sendas empresas participadas en Alemania (Goa-Invest Deutchsland) y en México (FGI Gestión Mex).