Comprar castillos a un euro. ¿En serio? ¡En serio! Puede que últimamente hayas visto noticias en las que propietarios de castillos, monasterios y otros edificios de carácter histórico venden sus propiedades por un euro. En realidad es como regalarlas. Pero, ¿por qué sucede esto?
Sucede en Italia, en Alemania o Escocia. Pero también en España. De hecho, puede que en alguna ocasión hayas encontrado pueblos enteros a la venta por cantidades de risa. ¿Es esto un chollo o no? Veamos por qué los propietarios de estos inmuebles deciden ponerlos a la venta o regalarlos.
Comprar castillos a un euro, ¿por qué?
Comprar una vivienda tiene asociados una serie de gastos que no siempre son tan evidentes. De hecho, si no has comprado nunca una propiedad, puede que no tengas tan claro que la adquisición también exige el pago de impuesto y, si procede, de los correspondientes gastos hipotecarios.
En cuanto la vivienda sea tuya, tendrás que hacer frente a otros costes, como por ejemplo los de reformas o mantenimiento. Y ojo, porque esto hay que estudiarlo. Ni las viviendas con grandes jardines son un chollo, ni las que tienen un derroche de metros cuadrados, tampoco. Pasa lo mismo con las piscinas, que son estupendas para el verano, pero cuesta un potosí mantenerlas. Y es que, cuanto más espléndidas suelen ser sus características, más costosos resultan los mantenimientos.
Y es precisamente por eso que hay propietarios de castillos que deciden ponerlos a la venta. El gasto que conlleva mantener construcciones con tantas habitaciones, dependencias y jardines es desmesurado. Para poder mantener estas propiedades en condiciones hay que gastar millones de euros todos los años. Y esto no todos los bolsillos pueden soportarlo.
¿Quién quiere comprar castillos a un euro?
Nadie. Comprar castillos a un euro no es un chollo, eso está claro. Y venderlos no es nada fácil, porque son muy pocos los que están dispuestos a gastarse un dineral en conservación. De hecho, los que también lo tienen complicado son los propietarios. La mayor parte de edificaciones están protegidas por leyes de conservación histórica, de modo que para deshacerse de ellas, sus propietarios están obligados a pedir autorizaciones.
Para expedirlas, los compradores tienen que demostrar que tienen recursos para mantener la propiedad e incluso presentar proyectos para promover su conservación.
El Castillo de Marienburg, propiedad de Ernesto de Hannover, vendido por un euro
Foto: Vanity Fair
Hay muchos ejemplos de castillos que se han vendido por un euro. Uno de los más célebres es el Castillo de Marienburg, cuyo propietario no podía seguir haciéndose cargo de los datos. Y no es extraño.
Está situado en la Baja Sajonia, a 30 kilómetros de Hannover y durante mucho tiempo fue la residencia oficial de la dinastía homónima.
La construcción tiene nada más y nada menos que 135 habitaciones, así que ante la imposibilidad de mantenerlo en condiciones, el príncipe Ernesto de Hannover llegó a un acuerdo de venta simbólica por un euro.
Sin embargo, son necesarios más de 30 millones de euros para su conservación. Menos mal que todos los años recibe alrededor de 200.000 turistas, lo que puede resultar de ayuda a los nuevos propietarios para conseguir su rentabilidad.