Nos vamos a Madrid para descubrir contigo un ático con piscina al que te querrás mudar ya. Se trata de una vivienda señorial de 160 metros construidos, con tres habitaciones, una de ellas tipo despacho, y un cuarto de baño completo. El piso se encuentra ubicado en Guindalera, un barrio perteneciente al distrito de Salamanca, que en sus inicios (estamos hablando de siglo XIX) fue concebido como barrio satélite del ensanche del Plan Castro.
Allí quedaban, todavía, muchos asentamientos hortelanos. Cuando el Madrid Moderno creció, el barrio se hizo grande y hoy es uno de los residenciales más distinguidos de Madrid. Aquí encontramos edificios centenarios, que son verdaderas joyas de la arquitectura del siglo pasado. Algunas de estas viviendas incluso presumen de contar con piscina en sus azoteas. ¡Es el caso del ático que queremos presentarte! Vamos a conocerlo.
Un ático con un piscina y un diseño muy peculiar
La casa, como te indicábamos, es un ático de 160 metros cuadrados ubicados en una finca señorial, con acceso por la puerta principal y dos ascensores a disposición de los nuevos propietarios. Lo cierto es que nos encontramos ante un piso único gracias a su excelente distribución y a la reforma que se hizo en 2021. En ese momento, sus propietarios decidieron mantener la estética retro-vintage y agregarle un toque moderno, conservando, eso sí, el suelo de parquet original y combinándolo con algunas paredes de piedra natural.
La entrada al piso comunica desde un pequeño vestíbulo a un salón comedor espacioso, situado junto a una cocina office totalmente equipada y amueblada. Está revestida, además, con baldosas cerámicas con un acabado brillante. La cocina, además, se encuentra bañada de luz natural, gracias a su orientación noroeste. Consta de unas vistas despejadas, excelentes, lo que hacen que esta vivienda esté llena de encanto por dentro y por fuera.
En esta reforma tan reciente también se ha incorporado una piscina-jacuzzi en la terraza. En la misma hay una barbacoa argentina. El salón comedor fue ampliado y se instalaron tres amplios ventanales retráctiles de PVC dobles, que aportan una gran luminosidad al comedor, con la instalación de nebulización en toda la zona de la terraza para refrescar el ambiente y poder disfrutar de la misma durante todo el año.
Un despacho para teletrabajar en este ático con piscina
Después de la zona de día, el pasillo nos llevará a la zona de noche, donde están los dormitorios. Al realizar la reforma, uno de los dormitorios se sacrificó para ser convertido en un espacio para teletrabajar o para usar con otro propósito funcional. Hay una habitación principal que goza de vistas a la terraza y está revestido con la misma pared de piedra natural que el comedor. El segundo dormitorio es un poco más amplio que el principal y tiene vistas al patio interior.
Debemos indicar, por otra parte, que el piso está prácticamente en el centro de la capital. En su entorno predomina la tranquilidad, la seguridad y espacios naturales. También están cerca los principales servicios: supermercados, bancos, colegios, tiendas y de estación de metro. Si quisieras, podría ser tuyo por 1.400.000 euros.